El año del gran terremoto del 3 de marzo de 1985, sin duda, nos marcó a todos los niños que jamas habíamos vivido un sismo tan intenso como aquel.
Recuerdo claramente haber estado jugando en el patio de mi casa con mi hermana, en el único flipper (pinball) que mi padre conservó de un emprendimiento fallido de unos años antes: “Flipper Center” del Cerro Barón de Valparaíso. La máquina en cuestión, era la española “Mars Trek”.
Ya cansados y con esa lamentable sensación de que la diversión del fin de semana termina para prepararse para el colegio al día siguiente; nos entramos a descansar. A minutos de haber ingresado a la casa, la tierra tembló y nuestras vidas ya no serían las mismas de antes.
Ese año, en el que Chile quedaría tristemente eliminado del mundial de México 86 en manos de Paraguay en el Estadio Nacional, el Señor Petete (Jorge Porcel) era el jefe de la Oficina del Jappening; los domingos se pasaban con las revistas “Kisikosas” de La Tercera y “Desafío al Ingenio” de Las Últimas Noticias; y en el que Terminator llegaría por fin a las salas de cine nacionales; las promociones era pilar fundamental de nuestra diversión.
En un momento en que estábamos con la moral baja y asustados aún por las repetidas réplicas del sismo de marzo, algo de juego no era sino una gran medicina para ocupar nuestro tiempo quebrándonos la cabeza tratando de resolver la gran apuesta que la bebida de Embotelladora Andina estaba por entregarnos.
“Se armó con los Puzzles de Coca Cola” fue una de aquellas promociones sencillas, pero que nos entregaron artículos tan divertidos como coleccionables, los que nos pasan de moda, pues siempre existirá un gran nivel de reto y diversión asociados a ellos.
La promoción se trató de una serie inicial de tres puzzles plásticos del tipo deslizables, que nos presentaba los logotipos de las tres marcas principales de la firma: Coca Cola, Fanta y Sprite.
Su forma era cuadrada y medían 6,5 cms., conteniendo 15 piezas cuadradas de 1,3 cms. más un espacio vacío que permitía deslizar las piezas. En la parte posterior se incluía un autoadhesivo con la imagen final del puzzle correctamente armado, como referencia.
Éstos se canjeaban con cuatro tapas marcadas, sin necesidad de dinero, algo muy común hasta finales de la década.
Posteriormente, se sumó el puzzle correspondiente a Diet Coca Cola, para completar un total de cuatro disponibles. De esta primera adición, podrás ver el comercial hacia el final de esta nota.
“Coca Cola, ¡más y más!”
Una de las características del refresco color negro, han sido los diferentes eslóganes utilizados a través de sus incontables campañas publicitarias. Sin embargo, hacia 1985 comenzamos a oír jingles con la tonada “Coca Cola, ¡más y más!”, dejando atrás al recordado “Coca Cola es así”, utilizado hasta 1984.
Es así como tras el éxito de esta promoción, hacia el verano de 1985-1986, una nueva serie de puzzles se sumarían a los cuatro disponibles.
Esta vez, se utilizarían imágenes serigrafiadas, entre las que encontraremos motivos veraniegos, deportivos y relativos a la distribución de las gaseosas. Todas las escenas, irían acompañadas del nuevo eslogan escrito en letras rojas. Esta vez, todos los puzzles tendrían fondo blanco.
Recuerdo que el primero de estos nuevos puzzles, fue el del hombre haciendo windsurf, el cual no obtuve canjéandolo en la botillería de mi barrio; sino que mi madre, quién era profesora, se lo había quitado a un alumno durante una de sus clases.
Posteriormente, se calcinaría en el incendio de mi casa en 1993. Sólo se salvarían el de Fanta y Sprite, los que ves en la foto que acompaña el inicio de este artículo.
COMERCIAL CON UN NUEVO PUZZLE
A continuación te presento el comercial que introducía el nuevo puzzle de Diet Coca-Cola, cortesía del canal de YouTube VHS y Discos AQB.
Al tratarse de una extensión, dura tan sólo unos pocos segundos, por lo que se asume que su predecesor fue ampliamente difundido.
¿Cuántos puzzles pudiste coleccionar? ¿Aún los conservas? ¡Déjanos tu comentario más abajo!